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Hubo un tiempo en el que la moda seguía las máximas de la teoría del 'trickle down', que aseguraba que las tendencias nacían cuando las clases sociales más bajas eran las que intentaban adoptar un nuevo estatus, apostando e imitando para ello la vestimenta de las clases sociales superiores. La teoría, planteada por Georg Simmel, se ha visto trastocada a causa no sólo del poder del streetstyle sino especialmente, cómo no, de las redes sociales. Ahora las tendencias pueden provenir, y de hecho lo hacen en la inmensa mayoría de casos, de abajo.
El hecho de que se hayan diluido las barreras de clase y de estilo queda patente en el front row de los desfiles, que en ocasiones es una curiosísima mezcolanza de figuras completamente antagónicas. También queda reflejado en muchos de los spots de las grandes marcas, donde se juntan celebridades y modelos de toda la vida con figuras nacidas de las redes sociales.
En España acabamos de asistir a un encuentro ciertamente curioso que ha tenido además lugar en un ascensor, un lugar que en la cultura pop siempre ha sido el escenario de momentos icónicos (que se lo digan a 'Anatomía de Grey', a 'Mad Men' o a Solange y a Jay-Z) y que ha sido el elegido por Nude Project para reunir a Victoria de Marichalar y Belén Esteban. Ambas lucen la misma prenda, una chaqueta cropped con cuello desmontable de piel sintética, que combinan de maneras opuestas, dejando claro así que esta nueva colección, que incluye alrededor de 50 prendas y sale a la venta el 30 de enero, no entiende de clases.
“Demuestra que lo sofisticado y lo provocador pueden coexistir y romper todas las barreras entre lo 'classy' and 'trashy', mostrando cómo un look chic puede tener ese toque gangster y rebelde que nunca pasa de moda”, señalan desde la marca.
“Queríamos anunciar que después de cinco años íbamos a presentar nuestra primera colección de mujer. Creo que al haber tenido una clientela femenina tan potente habiendo vendido hasta el momento ropa unisex, sólo tenía sentido hacer una colección para mujeres con la que se pudiesen sentir totalmente representadas. Al pensar en ellas, nos venía a la cabeza la idea del contraste, el diferente tipo de clientes que puede tener Nude Project y lo que les une, que es la actitud ante la vida más allá de la clase social o del círculo del que vengan. Queríamos representarlo visualmente y al reflexionar acerca de personajes que contrastaran, pensamos en ellas, pues son muy populares y se sienten representadas por la marca”, explica Bruno Casanovas, fundador de Nude Project.
“Pensamos que ese contraste a la audiencia le dejaría loca en un primero momento pero que después, cobraría sentido. Tenemos la suerte de haber creado relaciones más allá del mundo de la firma con ellas y siempre nos han tratado como familia. Juntarlas fue la cosa más “fácil” del mundo; les emocionaba el proyecto. Creo que es una campaña que va para la historia de España. Son dos mujeres increíbles”, asegura.
No cabe duda de por qué Belén Esteban es la princesa del pueblo, aunque a estas alturas, por méritos propios, bien podríamos decir que es toda una reina. Ella ha sabido enamorar a los que aman la prensa rosa que en ocasiones es denostada por un espectro cultural que peca de esnob al hacerlo. También ha conquistado a los que prefieren ver a Lalachus como colaboradora a un ex concursante de 'Gran Hermano' y por eso, cuando Esteban tomó las riendas de un capítulo de 'La Revuelta' a causa de una apuesta, escribió de forma involuntaria un nuevo episodio más en la historia televisiva de España. Pocas cosas hay más tiernas que ver cómo se convierte en una suerte de Mocito Feliz 3.0. que comparte con orgullo sus selfies con Bayona o Rosalía.
El magnetismo que despierta Victoria Federica es otro, pero es perfectamente compatible. “Tiene tres cosas fundamentales para triunfar. Lo primero es que es la primera persona de la monarquía presente en redes sociales y con una fuerte vinculación a temas de estilo de vida y moda. Por otra parte, se ha beneficiado de lo que se denomina la "marca colectiva" es decir, se relaciona con otros creadores de contenidos afines a ella que al final le proporcionan un traspaso de seguidores. Por último, tiene el perfil de chica elegante, con un poder adquisitivo alto y muy "polite", que funciona muy bien en redes sociales”, explicaba a ‘Elle’ Sergio Barreda, autor de ‘Vivir de las redes’ (Alienta Editorial).
Mientras se daba a conocer la campaña, ella estaba en el desfile de Alta Costura de Dior, dejando claro que se puede estar en un ascensor con Belén Esteban al mismo tiempo que compartiendo front row con Carla Bruni y Beatrice Borromeo.
"Los royals de la Casa Real española, que se han incorporado haciendo ostentación de su posición privilegiada sin ningún tipo de vergüenza, son muy importantes en el imaginario pijo contemporáneo", explicaba Raquel Peláez, autora de ‘Quiero y no puedo’, a Thais Villas en ‘El Intermedio’. "Son Victoria Federica y Froilán, que han contribuido a la creación de ese nueva arquetipo que está muy relacionado con el cayetanismo", señalaba.
No hace tanto, pensar que “La Esteban” y Victoria Federica protagonizarían una campaña metidas en un ascensor -o incluso en un palacio- nos habría sorprendido, pero en la actualidad, las redes sociales se han encargado de funcionar como un estabilizador de popularidad en el que quien sale ganando es quien lo observa. Porque en un mundo en el que ahora los nuggets se comen con caviar y las hamburguesas se infiltran en las galas de renombre, la reina de la televisión y la hija de Marichalar pueden ser, y son, las nuevas reinas del streetwear sin necesidad de dictaminar quién lleva mejor la corona.
Marita Alonso es experta en cultura pop y estilo de vida. Escribe acerca de fenómenos culturales desde una mirada feminista en la que la reflexión está siempre presente. No tiene miedo de darle una pincelada de humor a las tendencias que nos rodean e intenta que el lector ría y reflexione a partes iguales. Cuando escribe sobre relaciones, su objetivo es que la toxicidad desaparezca y que las parejas sean tan saludables como las recetas que intenta cocinar... Con dramáticos resultados, claro. Los fogones no son lo suyo.
Ha publicado dos libros ("Antimanual de autodestrucción amorosa" y "Si echas de menos el principio, vuelve a empezar") y colabora en diversos medios y programas de radio y televisión luchando por ver las cosas siempre de una manera diferente. Cree que la normalidad está sobrevalorada y por eso no teme buscar reacciones de sorpresa/shock mediante sus textos y/o declaraciones.
Licenciada en Comunicación Audiovisual por la Universidad Complutense, imparte master classes de cultura pop, estilo de vida y moda en diversas universidades. En Cosmopolitan, analiza tendencias, noticias y fenómenos desde un prisma empoderador.
