Es difícil no terminar las Navidades saturadas de beber y comer, con algún kilo de más y el estómago pidiendo un descanso. Pero no hace falta que te pongas a dieta, hacer ayuno intermitente puede ser la mejor herramienta para desintoxicarte, conseguir que tu cuerpo se recupere y volver a tu peso.

Pero el ayuno tiene muchos más beneficios, como nos cuenta Lidia Blánquez, terapeuta multidiscilplinar y experta en ayunos, con más de 30 años de experiencia acompañando a personas a trascender los límites de la nutrición convencional para mostrarles el camino hacia la salud y el bienestar total a través del ayuno.

Qué es el ayuno intermitente

Como nos explica Lidia, “el ayuno es una forma de no desayunar a primera hora y cenar temprano que te ayuda a preservar tu salud sin utilizar toda la energía vital que se requiere al hacer las cinco comidas recomendadas diariamente, en las que, además de desgastar el organismo por los procesos metabólicos continuos, emocionalmente genera más desbalance por los picos de glucosa en sangre constantes”. ¿Sabes cómo desengancharte del azúcar?

“Durante el tiempo de ayuno está demostrado científicamente por Yoshinori Ohsun, lo cual le valió un premio Nobel en el 2016 por sus investigaciones sobre sobre los mecanismos de la autofagia, que el cuerpo utiliza la energía que ahorra del proceso de la digestión para metabolizar, degradar y reciclar las células viejas”, cuenta Blánquez.

“A este proceso, que realizan muchísimos de mis pacientes en su día a día simplemente porque el cuerpo les pide desayunar más tarde y cenar temprano porque se sienten mejor, se le llama ahora ayuno intermitente y, más que una dieta, es una forma de economizar energía y utilizarla a favor del organismo”, aclara.

Como continúa explicándonos esta experta, “el cuerpo vive de energía que obtiene del aire y de los alimentos”.

“Según la medicina china, un 50% de esta energía le viene heredada por los padres y el otro 50% es adquirida por la ingesta de nuestros alimentos; es obvio que si le damos al cuerpo alimentos de calidad la energía será más óptima y, si encima la ahorramos, nos mantendremos más rejuvenecidos por la falta de desgaste energético que produce la digestión”, añade.

“Cuando al cuerpo se le priva de estos tiempos de descanso y de la falta de este espacio que da lugar a la autofagia, se le acumulan las proteínas y los orgánulos dañados en el interior de las células madre, llegando al envejecimiento del cuerpo y provocando inflamación continua en el tiempo, con sus consecuentes enfermedades inflamatorias, lo que da lugar a la aparición de enfermedades degenerativas”, explica Blánquez. Descubre los beneficios de pasarte a una dieta antiinflamatoria.

¿Qué sería entonces el ayuno intermitente? “Hablamos de ayuno intermitente a partir de 16 horas de descanso sin comer nada: se acabaría de comer a las 20.00 y se desayunaría a las 12.00 del día siguiente”, explica la experta. “Es el que está de moda, aunque insisto que es muy común entre los hábitos de vida”, apunta la experta.

Beneficios del ayuno intermitente

"¡Todos!", dice Lidia Blánquez. “El ayuno intermitente es el método antiaging hasta ahora insuperable por cualquier práctica o método y el más antiguo, pues es para el que nuestras células han sido entrenadas genéticamente hablando, a través de la historia de la humanidad, para preservar la vida”, subraya Lidia.

Como señala, “el ayuno intermitente reduce el estrés oxidativo, aumentando la producción de hormonas del crecimiento y de células madre; regula la tensión arterial y, con ello, los problemas cardiovasculares; baja el colesterol y triglicéridos, mejora la sensibilidad a la insulina controlando los niveles de glucosa; reduce la inflamación sistémica; mejora la microbiota y con ello la permeabilidad intestinal; es inhibidor de las células cancerígenas; mejora el estado mental, optimizando su elasticidad y disponibilidad energética neuronal; disminuye los riesgos de enfermedades degenerativa como Párkinson y Alzheimer”.

Y, como efecto colateral, Blánquez señala que el ayuno intermitente “adelgaza por la cetosis producida durante 16 horas propia de la degradación de las grasas, además de producir cambios metabólicos y favorecer la reparación y el reciclaje celular”.

mujer comiendo melocoton
Edward Berthelot//Getty Images

Ayuno intermitente, ideal después de los excesos de Navidad

Como señala Lidia Blánquez, “estos días la mayoría de persona, entre comidas familiares y sobras de Navidad, se sienten saturados y es el propio cuerpo el que les pide frenar aunque a la mente le cueste dar su consentimiento”.

Según cuenta la experta, muchas personas empiezan a hacer dietas por la mañana y acaban a las seis de la tarde cuando llegan a casa. “Yo empiezo por la mañana y estoy bien, ni siquiera tengo hambre, incluso a mediodía tiro con una ensalada pero la noche me confunde y empiezo a devorar como una loca“, confirma Lidia que le cuentan sus pacientes.

“Es obvio que el paladar está saturado y que necesita desviciarse”, dice la experta. “Desde mi experiencia de más de 34 años con los ayunos urbanos, puedo asegurar que es más fácil dejar de comer, que al día siguiente de empezar una dieta un trozo de brócoli. El ayuno es mejor que una dieta para volver al centro entrenando a la mente y con ello al paladar para recordarle de nuevo qué es lo saludable y que sea fácil diferenciarlo”, subraya Lidia. Y, como señala esta experta, “hablo de ayuno dirigido por un profesional especializado”.

Beneficios del ayuno para perder peso y deshincharse

Como ha señalado antes, uno de los efectos colaterales del ayuno intermitente es la pérdida de peso. “Por supuesto, pero para mí es un efecto secundario a la verdadera depuración que nos otorga el ayuno, realmente es lo que nos va a dar un espacio de degradación de todos los excesos y nos va a ayudar a volver a nosotros mismos”, recalca la terapeuta.

“Para mí el ayuno es un entrenamiento previo para volver a unos hábitos más saludables”, subraya.

“Después de este ayuno, que gestionaría de una forma óptima las reservas, sí que daría lugar a un ayuno intermitente en el tiempo junto a una dieta baja en carbohidratos y rica en grasas saludables, y un poco de proteína altamente biodisponible y de calidad”, recomienda la experta.

“Todo ello nos llevaría, más que a deshincharnos, a rejuvenecer y a sentirnos con más energía vital, que en estos tiempos anda muy escasa”, añade.

mujeres comiendo por la calle
Edward Berthelot//Getty Images

Un hábito para mejorar la salud general

¿Puede ser el ayuno un buen hábito que mejore nuestra salud en general? “Por supuesto. El ayuno debería de llevarse a cabo un par de veces al año. Para mí es verdaderamente aquel que te pone en cintura, te desvicia el paladar, aumenta tu autoestima y el deseo de seguir cuidándote en el tiempo para así generar todos estos beneficios que ancestralmente nos ha otorgado y nos ha traído hasta nuestros días”, dice Lidia Blánquez.

Además, como señala, “el ayuno intermitente es una forma de crear más conciencia en el día a día, de dejar de consumir la cantidad de alimentos que nos saturan y nos hacen daño”.

“Es el mejor hábito de vida que puedes tener en este momento para preservar tu salud por sus innumerables beneficios, acompañado de buenos alimentos en las dos comidas del día, que insisto que querrás comerlos saludables cuando hayas hecho un ayuno profundo”, añade.

¿Qué entiende esta experta por un “buen alimento”? "Un alimento óptimo es aquel que va liberando energía constante más que generarte picos de glucosa incontrolables a nivel físico y mental, que a la larga te enferman”.

“Una sociedad evolucionada y consciente es aquella que come poco y de calidad, y de esta forma preserva sus recursos y los comparte”, subraya esta experta.

Cómo iniciarse en la práctica del ayuno intermitente

¿Qué tipo de ayuno suave recomendaría a alguien que va quiere iniciarse en esta práctica? “Yo soy de las que cortan radicalmente, sobre todo cuando la salud está en juego, ahí soy implacable y llevo al paciente directamente a realizar un ayuno urbano”, apunta. Estos ayunos urbanos pueden ser desde un día a siete días y puedes compaginarlos fácilmente con tu ritmo de vida.

Pero, como nos explica la experta, el tipo de ayuno perfecto para ti dependerá también de cómo seas. “Cuando lo que quiero es crear unos buenos hábitos de vida más saludables acostumbro a decirles que coman dos veces al día y que sea una comida saciante. Depende también de las personas, pues en Naturopatía existen las personas que se levantan con las gallinas y las que se acuestan con ellas y su energía vital es de mañanas y cae en la tarde, y están las personas a las que mejor no les hables cuando se levanten y a medida que va pasando el día acaban siendo las reinas de la noche pues aumenta progresivamente su energía”, dice Lidia.

Como explica Blánquez, “la primera, como se ha acostado pronto, quizás necesita desayunar de manera óptima y depurativa por la mañana, comer a las 15.00 h o 16.00 h y se acabó”. Continúa: “La segunda necesitará no comer por la mañana, solo levantarse, pero sí a las 12.00 y quizás a las 19.00 o incluso 20.00”.

La elección del ayuno, como señala la experta, “también depende de la salud de las personas y, como decimos en medicina china, en dietética energética, de los órganos o meridianos que queremos tonificar con los alimentos ingeridos”.

“Incluso de su fuerza digestiva, pues a las personas, cuando se hacen mayores, les cuesta digerir y necesitan sus tiempos pero, desde luego, siempre comer menos”, añade.

Blánquez de lunes a viernes come cada 24 horas, lo que la mantiene más lúcida y presente con sus pacientes. “Si como durante el día, en las sesiones me incomoda estar digiriendo. Tampoco soy tan rarita, los creativos de Sillicon Valley, por contrato, comen una vez al día y no en horario laboral”.

Si tuviera que recomendar un tipo de ayuno fácil de seguir, Lidia Blánquez señala, como mínimo, el de 16/8, es decir, con 16 horas de descanso entre la última y la primera comida.

¿Qué bebidas no rompen el ayuno y podríamos tomar por la noche o al levantarnos? “La verdad es que por mi experiencia personal, observando el comportamiento de la sangre durante todo el proceso, lo único que de verdad preserva el modo ayuno son los caldos de fruta o verdura”, dice.

“Lo demás hace trabajar al cuerpo y es residual. Los caldos de huesos, si no se quiere romper ayuno, mejor como consomé durante las comidas, y si se desea tomar café, este último necesitaría otra entrevista… mejor después de las comidas”, señala la experta.

Ejercicio antes de romper el ayuno

¿Puede ayudarnos hacer ejercicio en ayunas para activar el metabolismo y favorecer la pérdida de peso? “Si, desde luego mis pacientes incluso durante el ayuno urbano siguen haciendo deporte y tiran de reservas más rápido, pues activan el metabolismo, con lo cual al organismo le cuesta más sentir la necesidad de entrar en modo supervivencia y libera más grasas para ser consumidas”, dice Blánquez.

Como explica la experta, “durante las mañanas, el cortisol está más elevado y la insulina más baja, y eso va a favorecer la movilización de las grasas, además de los elevados niveles de la hormona grelina, que a su vez facilita la liberación de hormonas de crecimiento”.

Pero, como apunta Blánquez, “esto siempre va a depender de las personas y de cómo devoran su glucógeno, ya que la gestión de este por su organismo puede hacer sentir mareo o no, por lo que siempre les recomiendo caldos de frutas o verduras durante el ayuno urbano para que, mientras queman, tengan un ligero aporte que les permita sentirse bien”.

“Muchos atletas que han practicado ayuno han mejorado sus marcas, incluso triatletas. Es cierto que con el ayuno baja el tono muscular porque se consume todos los líquidos y la grasa intramuscular, pero si se mantiene la persona con ejercicio regular es más difícil que baje”, señala.

Como explica, el cuerpo se mueve por energía, y la energía del cuerpo depende de los alimentos, pero también de otros factores: "la respiración, de las óptimas cascadas de electrones en sangre, de tus creencias, de tus emociones, del estado de tu organismo y de tu mente, de la reparación del sueño, de tus niveles de estrés, de dónde vives, de tus hábitos y, como decimos en medicina china, de si has heredado mucha energía de tus padres o no, etc."

"Tus depósitos de energía están en la fuente de la vida, que son tus riñones, y puede ser que tires más de la fuente de lo que lo repones", añade. Pero, si quieres sacarle un mayor partido a tu cuerpo, el consejo de Lidia Blánquez es consultar siempre a un especialista.

Consejos para hacer ayuno intermitente después de Navidad

Si nunca has hecho ayuno o un proceso depurativo, Lidia Blánquez recomienda: “Tomar por la mañana un litro de caldo de frutas con limón y jengibre. A las 12.00 h haría la ingesta de una manzana y a las 14.00 h comería ensalada con proteína y verdura, tomando una infusión digestiva después", explica.

"Ahora en invierno cenaría lo antes posible, por ejemplo, una buena crema de verduras, una crucífera al vapor, jugando con las especies y las hierbas secas, con una proteína más suave, tipo pescado. Para finalizar, una buena infusión depurativa", añade.

"Es un ritmo depurativo suave y muy beneficioso siempre que cada día se roten los alimentos para hacer la dieta variada, si no, el cuerpo genera alergias con aquello que come cada día muchas veces, responde inflamándose”, advierte.

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Experta en fitness, belleza, nutrición, salud, psico, pareja y sexo. Licenciada en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid, escribe en Elle.com y Womenshealth.com y ha escrito para muchas cabeceras de Hearst, “mi segunda casa”. En sus más de 25 años de profesión, ha pasado por Terra Mujer, Sport Life, Runners, Atresmedia, La Ser, Radio Aragón o el programa Bellas & Sanas. Es autora de Cambiar de vida es fácil si te dicen cómo. 15 pasos para conseguirlo y de Una vida en forma. La guía de la actividad física y la mujer a cualquier edad. Amalia también es instructora de fitness, profesora de yoga, yoga facial y fundadora de Yogabrunch.es. "Por suerte, la vida me ha permitido unir mis dos pasiones, el periodismo y el mundo del bienestar".