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Si hay un color que elegimos para pintar las uñas en verano ese es el blanco. Siempre suele ser un blanco opaco y muy luminoso que potencia mucho el bronceado y que da un aspecto muy juvenil a las manos y a las pies. Pero este año este tono deja paso a su versión más delicada con las coconut milk nails.
No nos extraña nada que sean las uñas blancas del verano después de haber visto cómo arrasan las fruit water nails. Es una manicura semitransparente que cubre la uña con un velo muy ligero de color, como si imitase las aguas con colores y sabor a fruta que tanto se llevan para refrescarnos.
Cómo son las coconut milk nails
Las coconut milk nails siguen esta misma premisa. Construyen una manicura en color blanco sutil y cremoso, brillante y ligeramente translúcido, que se adapta a todas las situaciones, looks y eventos.
Gracias a este tono blanco tan delicado, hace que las manos se vean mucho más finas y estilizadas. Es mucho más natural que el blanco opaco que se suele usar en verano y por eso es genial para unificar el tono de la uña, alisarla y, en general, perfeccionarla.
También se adapta mucho mejor a todos los tonos de piel, los sublima y lo mejor es que potencia el bronceado de una forma muy elegante.
Esta manicura es apta para todo tipo de uñas, ya sean cortas o largas, porque da mucha sensación de limpieza a las manos y es un color y crea un efecto de lo más versátiles.
Cómo se consiguen
Es una tendencia muy sencilla de seguir porque la puedes recrear tú misma en casa. Sólo necesitarás un par de capas de esmalte de uñas blanco y una capa final brillante para extremar la luminosidad, fundamental en esta manicura que busca un efecto jugoso e hidratado.
La laca de uñas no debe ser de un blanco demasiado fuerte ni muy consistente. Lo mejor es buscar un tono blanco roto más suave para que al aplicar una doble capa.
El tono Marshmallow de Essie es una de estas opciones de blanco más claro y de aspecto más líquido, que queda genial tanto en uñas largas como en uñas cortas.
Split Milk de Max Factor Masterpiece Xpress Quick Dry es un tono lechoso y de secado rápido. En el caso de este esmalte con una sola capa puede ser suficiente.
Si cuentas con una lámpara en casa, puedes hacerte tú misma la manicura semipermanente con esta laca blanca de la marca Modelones. El resultado que deja es mucho más brillante, hasta jelly, lo que imita mucho mejor el efecto de la leche de coco.
Este esmalte de OPI tiene una duración de hasta 7 días, su pincel permite una mejor aplicación y tiene una fórmula 3-free con menos acetona.
Green de Manucurist en el tono Milky White es 9-free y está formulado con ingredientes de origen biológico. Dura 7 días.